• Pon la mente en “estado no-sé”.
• Alimenta al Ser en vez de al ego.
• Se tierno contigo mismo; se justo contigo mismo; se sincero contigo mismo y esto hazlo también con los demás.
• Que todo lo que digas y hagas parta del corazón.
• Prefiere la inteligencia al intelecto y lo sencillo a lo complejo.
• Prefiere el amor a los estados emocionales.
• Recuerda que tu cuerpo es inocente. Ámalo ya que te permite expresar la vida.
• Recuerda no hacerte daño a ti mismo. No estés en guerra contigo mismo. Ponte en paz contigo y con el mundo.
• Mira a la belleza para hacerte bello en ella; mira a la nobleza para hacerte noble en ella.
• Mira al lugar en donde estén tus pies a cada minuto. No a otro sitio; ni al ayer ni al mañana.
• Mira a los que están cerca de ti. Ellos son el reflejo de Dios. Ellos son tu propio reflejo.
• Practica la limpieza de la mente, la virtud en la acción, la atención en el hecho de Ser y la Presencia en el Corazón.
• Agradece al Maestro, agradece a los Hermanos en la Vía. Agradece por disponer de la existencia.
• Que la Vía, la Verdad y la Vida sean tu aspiración y tu Trabajo.
• Recuerda a Dios todos los días.
• No busques más; permite que Él te encuentre.

Los 7 velos que cubren la visión del SER

• El velo de la ignorancia y el falso conocimiento.
• El velo de la identificación con la mente y sus contenidos.
• El velo de la identificación con el cuerpo.
• El velo de la identificación con la sensorialidad y los objetos de los sentidos.
• El velo de la identificación con las emociones.
• El velo de la dualidad yo-tú / yo-eso.
• El velo de la ilusión del yo.